La impresionante maqueta, de 36 metros cuadrados, reproduce también el Puente Romano de Calamocha, en Teruel, del itinerario de la vía romana que iba de Cástulo a César Augusta
Medio millar de figuras conforman el nacimiento que el pasado año fue el más visitado de la ciudad con 32.000 personas, una cifra que los Belenistas intentarán superar
Fulgencio Gil Jódar, alcade: “La Navidad no llega hasta que la Peña La Jarapa le canta ‘al Niño Dios’ de los Belenistas que nuevamente han logrado la ‘cuadratura del círculo’ con un belén que aúna tradición, arte e historia”
Lorca, 8 de diciembre de 2025. Las Torres de Herodes, Fasael, Hippicus y Mariamme, presiden la espectacular maqueta de 36 metros cuadrados del Belén municipal que a mediodía de este lunes se ha inaugurado en el patio porticado del Palacio de Guevara. “La Navidad no llega hasta que la Peña La Jarapa le canta ‘al Niño Dios’ de los Belenistas que nuevamente han logrado la ‘cuadratura del círculo’ con un belén que aúna tradición, arte e historia”, ha manifestado el alcalde, Fulgencio Gil Jódar.
El Belén municipal, el más monumental de la Región de Murcia, recrea las torres del Palacio de Herodes, cuyos nombres homenajeaban a su hermano, Fasael; a su amigo, Hippicus; y a su mujer, Mariamme. Tenían 50, 43 y 23, metros de altura, respectivamente. Eran símbolo de autoridad y grandeza, a través de la arquitectura. “Pero no es el único monumento que han reproducido a escala los Belenistas, ya que también se recrea el Puente Romano de Calamocha, en Teruel, del itinerario de la vía romana que iba de Cástulo a César Augusta”, ha destacado el alcalde.
Medio millar de figuras conforman el nacimiento que ha sido renovado prácticamente en su totalidad y que se espera sea visitado por más de 32.000 personas, como ha explicado el presidente de la Asociación Belenista, Miguel Ángel Hernández, durante el recorrido en el que ha ofrecido todos los detalles al alcalde. “Son cifras muy importantes que sitúan al Belén municipal como el monumento más visitado durante la Navidad. Recibe visitas de lorquinos, pero también de ciudadanos de poblaciones limítrofes que acuden llamados por la monumentalidad de la maqueta que cada año logra sorprendernos a todos”, ha añadido Gil Jódar.
Y entre esas sorpresas, la biblioteca de Celso que el presidente de los Belenistas reconocía les había costado “sangre, sudor y lágrimas”. Fue construida aproximadamente entre los años 114 y 125 en honor al senador, cónsul y procónsul romano Tiberio Julio Celso Polemeano, por el hijo de Celso, Tiberio Julio Áquila Polemeano. La biblioteca fue diseñada de acuerdo con los principios del arquitecto romano Vitruvio. Está orientado hacia el este, al sol de la mañana, para beneficiar a los madrugadores. “La biblioteca albergó en torno a 12.000 rollos y también sirvió como tumba del cónsul romano Tiberio Julio Celso Polemeano, lo que es poco habitual. Esta biblioteca era la tercera más grande del mundo antiguo, detrás de la de Alejandría y Pérgamo”, ha explicado.
Los Belenistas arrancaban en la Navidad de 1998 con la tradición de montar el Belén municipal. Entonces, se situaba en la sala de exposiciones de la Casa Consistorial. Mucho antes de que hubiera belenes en Lorca, existía el culto a la imagen de Nuestra Señora de Belén, allá por los inicios del siglo XVIII, celebración que se realizaba en una capilla de la iglesia de Santiago y más adelante, también en una ermita de Aguaderas datada en 1743 y sita en el partido del aljibe de Aguaderas. Así lo relataba hace sólo unos días el pregonero de la Navidad, el director del Museo Arqueológico Municipal, Andrés Martínez Rodríguez. Recordaba que hasta muy avanzado el siglo XVIII, “no hay ninguna constancia de belenes en Lorca, hecho que fue lo normal en los territorios fuera del reino de las Dos Sicilias”.
San Francisco de Asís organizaba en el siglo XIII un Belén viviente en Greccio (Italia), el germen de la elaboración del belén. “Fueron las órdenes religiosas italianas y napolitanas, fundamentalmente las clarisas y los franciscanos, las que difundieron y trajeron los primeros belenes a España. Posiblemente a Lorca llegaron estos primeros belenes durante el siglo XVIII para montarse en los conventos, pudo ser que los franciscanos y las hermanas clarisas dispusieran de belenes y que aprendieran la técnica de cómo hacer figuras para el pesebre, como parece ilustrarlo el hallazgo en 2003 de un molde para la realización de la figura de un rey mago, durante las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo en un pequeño sector del convento de las Claras en la calle Corredera”, aportaba Martínez Rodríguez.
El alcalde ha hablado de la importante labor de la Asociación Belenista de Lorca. “Durante todo el año trabajan para mantener la tradición. Las escenografías históricas de este año son impresionantes. El belén es un recorrido narrativo completo, desde la Anunciación hasta la Huida a Egipto. Las dimensiones de la maqueta con 36 metros cuadrados y 2,5 metros de alto no dejan lugar a dudas en cuanto a su monumentalidad. Es un monumento dentro de otro monumento, el Palacio de Guevara, que suma estos días a sus atractivos el Belén monumental municipal. A los Belenistas les brindamos nuestro reconocimiento por su trabajo. Un esfuerzo que llevan a cabo durante todo el año para sorprendernos en estos días de Navidad”.
Cientos de personas han acudido este lunes a la inauguración. El patio del Palacio de Guevara se quedaba pequeño para acoger al público que ha disfrutado, como viene siendo habitual, de los primeros cánticos de Pascua que ha ofrecido la Peña la Jarapa, del barrio de San Cristóbal. “Lo decía, no comienza la Navidad hasta que no inauguramos el belén municipal a los sones de la Peña La Jarapa”. El alcalde ha animado a todos a visitar el nacimiento, como también los que conforman la Ruta Belenista. “Una ruta que nos lleva por monumentos como este Palacio de Guevara, pero también por iglesias, conventos, museos… Una tradición para cumplir en familia”.
