Actuará como alternativa a la institucionalización garantizando el derecho de elección de vida para personas con discapacidad intelectual, parálisis cerebral y el desarrollo del espectro autista
La primera vivienda contará con ocho plazas, aunque con posibilidad de ampliación a doce, pero ya se proyecta la construcción de tres unidades más con idéntica capacidad
Fulgencio Gil Jódar, alcalde: “Sus ocupantes tendrán una actividad totalmente normalizada, aunque recibirán apoyos las 24 horas, los 365 días del año, en la modalidad de atención a sus cuidados y necesidades”
Viernes, 25 de julio de 2025. En la calle Alfarería, junto a la Escuela Infantil Municipal, en el barrio de La Viña, se ha iniciado este viernes la construcción de la primera unidad de convivencia que levantará la Asociación de Padres con hijos con discapacidad Intelectual de la comarca de Lorca, Apandis. Esta vivienda, que se construirá en un solar cedido por el Ayuntamiento, será una alternativa a la institucionalización garantizando el derecho de elección de vida para personas con discapacidad intelectual, parálisis cerebral y el desarrollo del espectro autista.
La primera unidad contará con ocho plazas, aunque con posibilidad de ampliación a doce, pero ya se proyecta la construcción de tres unidades más con idéntica capacidad. “Sus ocupantes tendrán una actividad totalmente normalizada, aunque recibirán ‘apoyos’ las 24 horas, los 365 días del año, en la modalidad de atención a sus cuidados y necesidades”, ha afirmado el alcalde, Fulgencio Gil Jódar, en el acto de colocación de la primera piedra al que también acudía la consejera de Política Social, Familia e Igualdad, Conchita Ruiz; la directora general de Discapacidad, Miriam Pérez; el presidente de Plena Inclusión, Joaquín Barberá; el presidente de Apandis, Antonio Bastida; y la directora de Apandis, Marita Arcas.
Gil Jódar ha manifestado que la construcción del Residencial Apandis es “respuesta a un estudio realizado por la organización en base a la información aportada por el Imas sobre el estado de las listas de espera donde consta la petición de una vivienda tutelada de forma específica por 10 ciudadanos”.
El Residencial Apandis se iniciará con la primera unidad de convivencia con ocho plazas, aunque con posibilidad de ampliación a doce. “Se inicia con intención de continuidad, ya que en un futuro se pretenden construir otras tres unidades con idéntica capacidad. Se trata de un nuevo recurso con la implantación de forma efectiva del Modelo de Planificación Centrada en la Persona con el que se presta una atención integral, donde ésta no sea quien deba adaptarse a la vida colectiva en una institución, sino que sea el recurso en el que se resida el que se adapte de forma personalizada. Por supuesto, teniendo en cuenta las expectativas y necesidades de cada persona, recibiendo aquellas atenciones que necesite en cada momento determinado y utilizando recursos de los diferentes servicios, y siendo, en todo momento, la protagonista real de su vida”, ha añadido.
El proyecto se construirá en una parcela calificada como equipamiento público, situada en el ámbito del Peri 5, en el barrio de La Viña, habiendo sido cedida por el Ayuntamiento de Lorca a Apandis. Cuenta con una superficie de 2.456,52 metros cuadrados que han sido cedidos por una duración máxima de 75 años. La edificación consistirá en la construcción de un edificio nuevo aislado, compuesta por una planta baja principal, donde transcurrirá mayoritariamente la permanencia habitual de sus 8 convivientes, y una planta sótano destinada a los servicios comunes. “Dispondrá también de zonas de ajardinamiento y un huerto ocupacional para los residentes convivientes”, ha detallado el alcalde.
La primera unidad de convivencia tendrá cuatro dormitorios individuales, con baño y ducha, y con la posibilidad de tener una sala estar cuando su adjudicatario posea, además, discapacidad física asociada; dos dormitorios dobles, también con baño en su interior; comedor de uso exclusivo para los convivientes de esta unidad, salita de estar, cocina, un aula polivalente, un despacho de profesionales, aseo independiente compartido fuera de los dormitorios y ascensor. En la planta sótano existirán dependencias para ser destinadas para su uso común, lavandería, gimnasio, salón de ocio para las celebraciones de evento y proyecciones, una sala de atención especializada como fisioterapia, enfermería y podología, y garaje, dos almacenes y el cuarto de instalaciones, cuarto de basuras y cuarto de limpieza.
El presupuesto de esta actuación será de 912.233,90 euros. El proyecto cuenta con la subvención de 520.000 euros otorgada a través de la Dirección Gerencial del Instituto Murciano de Acción, para la adquisición, construcción, remodelación y equipamiento de recursos residenciales del sector de personas con discapacidad en el Marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia Next Generación EU, en la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Es un paso más, ha dicho Gil Jódar, “para que las personas con discapacidad intelectual, parálisis cerebral y del desarrollo del espectro autista puedan vivir como quieren hacerlo. Por primera vez, se les da la opción, que no es una opción, sino el derecho de elección sobre cómo y con quién quieren vivir. Pero cubriendo todas sus necesidades en cuanto a atención, lo que les permitirá ser en todo momento protagonista real de su vida. La vida que ellos han decidido llevar. Se trata de un proyecto muy ambicioso que, como decía, pretende tener continuidad. Este viernes ponemos la primera piedra de esa primera unidad de convivencia, pero estamos seguros de que muy pronto vendrá la segunda, la tercera y la cuarta”.